Esto es lo que NO es una Marca Personal según Richard Branson

La marca personal va más allá de la simple apariencia y se adentra en cómo proyectamos quiénes somos en realidad. En el mundo actual, donde la imagen y la autenticidad son cruciales, es esencial comprender qué no forma parte de una marca personal para evitar caer en errores comunes que pueden sabotear nuestros esfuerzos.

Richard Branson, el visionario emprendedor detrás de la icónica marca Virgin, es un ejemplo perfecto de cómo una marca personal sólida puede influir positivamente en todas las facetas de una carrera profesional. Conocido no solo por su éxito en los negocios, sino también por su espíritu aventurero y su autenticidad, ha demostrado que una marca personal auténtica y bien construida puede ser un poderoso activo.

Branson enfatiza que una marca personal no se trata de crear una fachada o seguir tendencias pasajeras, sino de ser genuino y fiel a uno mismo en cada paso del camino. En este artículo, exploraremos cinco aspectos clave que, según Richard Branson, no definen una marca personal:

1. No es un personaje: desarrollar tu marca personal no consiste en inventar un personaje ficticio que solo sacas a relucir en ciertas ocasiones. En su lugar, se trata de realzar tus atributos genuinos y presentarlos al mundo. La autenticidad es fundamental; mostrarte tal y como eres es lo que te permitirá conectar de forma auténtica con tu audiencia.

2. No es una imitación: copiar a otros con el objetivo de atraer atención puede perjudicar tu marca personal. Richard Branson subraya la importancia de ser auténtico y sobresalir por lo que verdaderamente eres. Proyectar tu esencia única te diferencia y crea una conexión más auténtica con las personas que te rodean.

3. No es esporádico: construir una marca personal sólida requiere un compromiso constante y prolongado. No es un esfuerzo ocasional, sino un trabajo continuo que implica reflexionar sobre uno mismo y mantener la coherencia con tus valores, personalidad y objetivos. Solo así podrás forjar una reputación duradera y sólida.

4. No es un cambio superficial: cambiar tu apariencia externa, como el color de tu cabello o tu vestuario, no redefine tu marca personal. La apariencia puede ser una herramienta para reflejar tus valores, pero no es la totalidad de tu marca. La verdadera marca personal se basa en tu esencia y en cómo comunicas tus valores y objetivos.

5. No es una estrategia de ventas: utilizar tu marca personal exclusivamente como un medio para vender sin mantener la coherencia puede dañar tu reputación. La autenticidad y la consistencia son esenciales; enfócate en el impacto y el legado que deseas dejar en el mundo en lugar de solo buscar aumentar tus ingresos.

Comprender qué no es una marca personal según Richard Branson te permite evitar errores comunes y centrarte en lo que realmente importa, ahora que ya lo sabes ¡Empieza hoy y haz que tu marca personal refleje verdaderamente quién eres!

- Ale Aguíñiga  

Consultora en Imagen y Personal Shopper especializada en colorimetría e imagen personal inclusiva.